“La inteligencia de un individuo se mide por la cantidad de incertidumbre que es capaz de soportar”. Enmanuel Kant

La incertidumbre es un sentimiento que interfiere en nuestro desarrollo personal. Puede llegar a ser incapacitante, a inmoviliazarte y a no permitirte salir de tu zona de confort.

En este momento de “incertidumbre”, en el que cada día el escenario cambia, los miedos se disparan y los pensamientos que surgen pueden llegar a sabotear nuestras propias posibilidades de aprender y emprender acciones que nos pueden ayudar a explorar todo nuestro potencial.

Desde mi propia experiencia, te diré que ACEPTAR la situación en la que nos encontramos y confiar en tus capacidades, ayudará a reducir la ansiedad y facilitará que tu cuerpo se relaje y deje de estar a la defensiva.

Darnos PERMISO para experimentar todas las sensaciones que nos embargan y decretar nuestro estado, sea el que sea, nos permitirá pasar antes a la acción. Dar un paso al frente y actuar a pesar de nuestros temores o miedos, desvanecerá poco a poco los pensamientos limitantes, no realistas, que aparecen cuando el futuro es incierto.

No alimentes esos pensamientos, tienden a irse a un futuro lleno de sombras. VIVE el momento PRESENTE como el único tiempo válido que podemos vivir. “El ayer ya no está, el mañana no ha llegado, hoy es el único tiempo que podemos vivir”.

No te tomes las cosas de forma personal, sé un OBSERVADOR de la experiencia.  Sé COMPASIVO; no solo con los demás, sino contigo mismo/a.

Sé CREATIVO/A. Ponte en marcha. Crea objetivos a corto plazo y ve a por ellos. Alcanzar los pequeños logros te motivará a marcarte otros más grandes.

Y nunca dejes de creer en ti. La CONFIANZA en uno/a mismo/a es la clave para superar con éxito los procesos de cambio. Y si crees, que solo no puedes, busca ayuda profesional. No estás solo/a.